Casa rural Parada Real

En Casa rural Parada Real se combinan lo rústico y clásico con lo moderno y el confort. Se sitúa en Garganta la Olla, un municipio español de la provincia de Cáceres, Extremadura.

Tiene una capacidad para 10 personas.

Disponemos de habitaciones temáticas vinculadas a la historia de nuestro hermoso pueblo; cada una con su aire acondicionado frío-calor, televisión plana, Wi-Fi y baños privados. En nuestras instalaciones también contamos con el restaurante La Fuente donde disfrutará de nuestro nutritivo desayuno, tradicionales recetas extremeñas y una barra donde los vinos de la tierra y cervezas artesanales conquistarán su paladar.

Servicio a la habitación, información turística, calidez y amabilidad son algunos de los elementos que harán que, durante su estancia con nosotros, se sienta como en casa mientras disfruta y explora las sierras e historia de la Comarca de la Vera.

Nuestro objetivo es brindarle una experiencia única en la cual pueda disfrutar de la historia, naturaleza y armonía de nuestro pueblo. Con un toque rústico y rural, y siempre manteniendo el confort como prioridad, Parada Rural ofrece todo lo necesario para que te sientas como en casa mientras exploras y creas nuevas memorias. Brindamos la atención y servicios necesarios para satisfacer a todo tipo de viajeros, desde nacionales hasta extranjeros, desde familias o parejas hasta solos aventureros; logrando así adaptarnos a cualquier tipo de demanda.

Senderismo - trekking, Rutas a Caballo, Golf, Multiaventura, Escalada, Bicicleta de montaña - BTT.

A parte, en los alrededores de Garganta La Olla podrá realizar:
• Senderismo
• Caminatas y paseos micológicos en el otoño.
• Visitar el Monasterio de Yuste.
• Caminar por las gargantas naturales.
• Visitar el centro histórico de Plasencia, Trujillo, Cáceres.
• Paseos a caballo
• Rutas en bicicleta
• Avistamiento de aves en el Arrocampo (Saucedilla).
• Visitar el Parque Nacional de Monfragüe

Os recomendamos visitar las Gargantas naturales que bordean nuestro hermoso pueblo, detenerse a escuchar el arroyo y la naturaleza y respirar un aire puro, lleno de armonía.