La Posá

La Posá es una casa recibe el nombre de La Posá porque desde el siglo XVI se instauró en dicha ubicación un establecimiento de albergue para mercaderes y caminantes que ha ejercido como tal prácticamente hasta mediados del siglo pasado.

Restaurada a todo confort, pero a la vez tratando de conservar el tipismo del antiguo establecimiento, esta Casa Rural hace sentir al huésped como si entrara en un mundo diferente, donde no parece que pase el tiempo.

Consta de una magnífica entrada con su patio de casa, lugar donde dormían los inquilinos al calor de la lumbre, artesonado de madera, cocina rústica con lumbre, cocina de servicio, comedor con televisor y radio, tres habitaciones dobles y una individual, todas ellas con aire acondicionado y servicio; la de lujo, además, dispone de televisor y una amplia terraza con vistas a la plaza del pueblo.

Piso superior de parquet, amplio y rústico patio con su antiguo pozo de cantería y su abrevadero para las caballerías, portal a la entrada que hace preservar de las inclemencias a la enorme y antigua puerta de la posada

Toda la casa se encuentra adornada con elementos rústicos de la zona.

Se puede disfrutar de una experiencia para muchos novedosa y que consiste en hacer las faenas propias de un cabrero. Guiados por un cabrero de la localidad, éste les enseñara cómo es el ordeño de los animales, su alimentación, la vida que llevan, la elaboración del queso y todo en un marco completamente natural como es el terreno donde desarrolla su actividad diaria.