Casas Rurales Saraih I y II

Muy bien

Alexandra Stan

Todo perfecto,la dueña muy amable nos trató muy bien!Tuvimos una estancia perfecta,casa muy bien equipada!gracias por todo!Recomendamos la casa!!

Volveremos

Iván López Molera

Fuimos en el puente de la Constitución por un intercambio con la banda de Casasimarro. Alquilamos la casa más grande y nos encantó. Nos dejaron en el comedor un plato de nueces y dos bandejas de mandarinas como detalle de bienvenida. La casa es bastante amplia, con un comedor con chimenea donde hacer prácticamente la vida si vas en invierno. En el patio trasero había una barbacoa en común con la otra casa, la cual no utilizamos por no disponer de tiempo. En resumen, un sitio al que volveremos sin dudar. Gracias por todo Esperanza, Iván López Molera

Juan Castañeda

Juan Camilo Castañeda Arboleda

Esta casa, ubicada en Rubielos, es el lugar apropiado para acercarse a la vida rural y conectarse con la naturaleza. La casa es un lugar tranquilo, ordenado y silencioso. Está a las afueras del pueblo, por eso permite tener contacto directo con las huertas y los cultivos de la zona. Es un lugar apropiado para ir con la familia, para que los niños jueguen seguros. En Rubielos me gustó mucho caminar por los caminos del pueblo, se respira un aire muy limpio y es un ambiente tranquilo. Desde la casa fue fácil llegar a Alarcón, uno de los pueblos más bonitos que conozco de España, donde hay varias iglesias antiguas y un Castillos de la edad media que valen la pena conocer, además del pantano de Alarcón, donde también se pueden hacer caminatas. Y otro plan que me gustó de la zona es ir al Picazo y caminar por los alrededores del río Júcar, en el que creo que es posible bañarse en el verano.

Muy acogedor

Ana Torres

Pasamos el puente de San Vicente en las Casas Rurales Saraih con unos amigos y sus nenas. Fuimos un total de 10 personas, con perrito incluido y estuvimos muy cómodos. La casa es grande y está equipada con lo necesario, así como el jardín. Ideal para los niños. No salimos mucho por el mal tiempo, pero sí disfrutamos de la chimenea. Los dueños muy amables, nos informaron de todo. Las niñas cogieron rabanitos del huerto y fueron a buscar huevos. Nos regalaron incluso vino! Pensamos volver en primavera y ver los cerezos en flor. Muchas gracias.