Índice
- Ruta por Guadalupe y el Geoparque de la UNESCO Villuercas-Ibores-Jara (Cáceres)
- Ruta por el Valle del Ambroz y Tierras de Granadilla (Cáceres)
- Ruta por la Sierra de Gata y Las Hurdes (Cáceres)
- Ruta por la Reserva de la Biosfera de La Siberia y La Serena (Badajoz)
- Ruta por Mérida y su entorno (Badajoz)
- Ruta por Zafra y Tierra de Barros (Badajoz)
El verano es sinónimo de tiempo libre, de pasear, de reconectar con la naturaleza. Pero cuando aprieta el calor, mejor que las rutas acaben en un refrescante chapuzón, ya sea en una piscina natural o en una playa paradisíaca con bandera azul. El problema suele ser encontrar un destino que no esté muy masificado. Una alternativa es Extremadura, una comunidad autónoma única y extraordinaria, en la que se pueden descubrir paisajes sorprendentes y de lo más refrescantes.
Te dejamos un listado con seis rutas veraniegas con chapuzón incluido en las provincias de Cáceres y Badajoz. Lo mejor es que no hay que madrugar mucho ni agobiarse con prisas para encontrar lugar en una playa abarrotada.
Ruta por Guadalupe y el Geoparque de la UNESCO Villuercas-Ibores-Jara (Cáceres)

Empezamos la jornada en Guadalupe, destino religioso tradicional en la Sierra de las Villuercas. Hay que ver el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, declarado Patrimonio Mundial, y pasear por su casco histórico con arquitectura típica serrana de balcones y soportales. Te proponemos hacer la ruta de los Molinos, de 12 kilómetros, que pasa por el Embalse El Mato.
Estarás en pleno Geoparque Mundial de la UNESCO Villuercas-Ibores-Jara, todo un espectáculo de la naturaleza y con gran riqueza paleontológica. Para recorrerlo a pie, pasa por el Centro de Recepción de Visitantes de Cañamero. También puedes observar el entorno desde el coche siguiendo dos carreteras paisajísticas: la EX-118 de Guadalupe a Castañar de Ibor (de 29 km) o la EX-102 de Logrosán a Guadalupe (de 27 km).
Para refrescarte, acércate a la playa con bandera azul de Cancho del Fresno o a la piscina natural Charco de La Nutria, ambas en Cañamero. Si quieres estirar un poco las piernas, no te pierdas el sencillo Sendero Azul ‘Desfiladero del Ruecas’, en el mismo municipio: tiene 685 metros de longitud y discurre por un camino encajado entre altas paredes y por una estrecha garganta que se ha formado a lo largo de millones de años. Durante su transcurso, el río Ruecas forma pozas y rápidos.
Ruta por el Valle del Ambroz y Tierras de Granadilla (Cáceres)

En tu escapada extremeña no puede faltar una visita al Valle del Ambroz. Es una serranía que pasa del paisaje de dehesas a la alta montaña. Un buen lugar para oxigenarse en el medio natural y practicar actividades como pesca, observación de aves, senderismo o deportes acuáticos. Se puede combinar con visitas culturales al barrio judío de Hervás y al palacio de Sotofermoso en Abadía, ambos declarados Conjunto Histórico Artístico.
Aprovecha para relajarte en las termas romanas del balneario de Baños de Montemayor. Para un baño refrescante, puedes ir a la piscina natural de La Garganta Ancha, en la parte alta del pueblo de Casas del Monte, con zona que cubre poco para niños y niñas y otra con aguas más profundas. Está equipada con chiringuitos, parque infantil, campos de vóley playa y albergue turístico.
En la comarca vecina de Tierras de Granadilla está el embalse de Gabriel y Galán. En su orilla encontrarás Granadilla, fundada por los musulmanes en el siglo IX. Es una villa amurallada que está declarada Conjunto Histórico-Artístico desde 1980 y en 1984 se incluyó en el Programa de Recuperación de Pueblos Abandonados. Desde entonces, muchos estudiantes se acercan cada año para ayudar en su rehabilitación.
Actualmente está adscrita al municipio de Zarza de Granadilla, ya que a mediados del siglo XX, fue desalojada tras declararse zona inundable por las obras de construcción del embalse. Lo más destacado para ver son sus murallas almohades, que se levantaron como protección, ya que la villa era de paso obligado para todo aquel que hacía la Vía de la Plata. En su parte más vulnerable, la noroeste, se levantó una alcazaba que años más tarde pasaría a ser un castillo cristiano, ya en la Edad Media. Podéis consultar aquí sus horarios de visita.
La ventaja de estar junto al embalse de Gabriel y Galán es que la zona se ha convertido en un enclave importante para la observación de aves. Las grullas son las más numerosas, pero también se pueden avistar cigüeñas blancas y negras, así como varias clases de anátidas y otras aves acuáticas.
Ruta por la Sierra de Gata y Las Hurdes (Cáceres)

En la frontera con Portugal, en el noroeste de Extremadura, está Sierra de Gata. Ofrece una amalgama de contrastes culturales y naturales para desconectar este verano. Desde una arquitectura de la zona característica con entramados en madera de castaño, como bien se puede apreciar en Robledillo de Gata, hasta los pueblos con una lengua propia, “a fala”, en San Martín de Trevejo, Eljas y Valverde del Fresno.
Puedes conocer sus montañas y valles con rutas de senderismo, en bici y en coche, con la carretera paisajística EX-205 de Santibáñez el Alto a Valverde del Fresno, de 37 km. Si después de todo te apetece un baño, hay innumerables lugares para pegarse un chapuzón como las piscinas naturales de Acebo, con zonas acondicionadas para el descanso; las de Cadalso, en el río Árrago; La Alameda, en un área recreativa de Moraleja; o Los Molinos en Eljas, con aguas cristalinas y fácil acceso, entre otras.
Otro paraíso próximo son Las Hurdes, donde destaca el Meandro del Melero. Es el transcurso caprichoso del río Alagón cerca de Riomalo de Abajo. ¡Por algo es uno de los paisajes más fotografiados de Extremadura! La carretera paisajística EX-204 lleva desde aquí hasta Pinofranqueado, siguiendo un recorrido de 28 kilómetros por el pinar de la Sierra de las Batuecas.
En esta zona te puedes bañar en la piscina natural del río Los Ángeles, en Pinofranqueado; en el paraíso de Las Mestas, en el río Ladrillar; o en Azabal, equipada con pista polideportiva, chiringuito y aseos con duchas.
Ruta por la Reserva de la Biosfera de La Siberia y La Serena (Badajoz)

No nos vamos a Rusia, sino a una comarca extremeña llena de naturaleza, patrimonio y cinco grandes embalses. La Siberia es un tesoro que está declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, así que es un destino ideal para los que buscan actividades al aire libre como observación de aves, senderismo o práctica de deportes acuáticos.
No se queda atrás el patrimonio histórico y cultural de la comarca, con yacimientos prehistóricos, pinturas rupestres y pueblos de pasado señorial como Herrera del Duque o el Castillo de Puebla de Alcocer.
En La Serena, hay tres embalses que conviven en el paisaje con dehesas y zonas esteparias. Te recomendamos la carretera paisajística EX-322 de la isla del Embalse de la Serena, de 6 kilómetros, desde la que observar la segunda mayor bolsa de agua de la Península Ibérica.
En esta ruta puedes pegarte un baño en la playa de Orellana, conocida como Costa Dulce, que es la primera de interior de España que consiguió el distintivo de bandera azul. Otras que cuentan con ese reconocimiento son la playa de Campanario o de Costa Alegre; la playa Los Calicantos, en la cola del embalse de Orellana; la playa de Peloche, con pinturas rupestres, castros celtas y rutas prerromanas; y la playa de Puerto Peña, en el embalse García de Sola, con rutas de senderismo al Castillo de Puebla.
Ruta por Mérida y su entorno (Badajoz)

La ciudad de Mérida, capital de Extremadura, es Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1993. Si aún no la conoces, hay que visitarla sin prisas porque tiene una abultada lista de monumentos para ver. A destacar el conjunto de monumentos romanos conformado por el Teatro, el Anfiteatro y el Circo, así como el Acueducto de los Milagros, el Puente Romano, el Templo de Diana y el Museo Nacional de Arte Romano, con la mayor colección de estas características de España. Su pulmón verde es el río Guadiana, con el paseo fluvial “la Isla” de casi dos kilómetros con puentes monumentales.
En los alrededores de la capital extremeña, vale la pena acercarse a Alange, pueblo conocido por las termas de origen romano de su balneario, declarado Patrimonio Mundial, así como por su castillo y gran embalse. Esta localidad, de hecho, ostenta el título de Villa Termal de Extremadura, como Baños de Montemayor.
Entre Aljucén y La Nava de Santiago está el Dolmen de Lácara, un monumento megalítico de grandes dimensiones en plena dehesa. Medellín es otro destino lleno de cultura en el que destaca el teatro romano, el castillo medieval y su puente del siglo XVII. No dejes de visitar el Parque Natural de Cornalvo y el embalse romano de Proserpina, que tiene playa accesible.
En esas horas en las que más calor hace, puedes darte un baño en diferentes playas fluviales como la de Entrerríos, en Villanueva de la Serena; Molina de Porra, en Villanueva del Fresno; o la playa de Orellanita, en Orellana de la Sierra.
Ruta por Zafra y Tierra de Barros (Badajoz)

La Vía de la Plata es el Camino de Santiago más importante desde el sur peninsular, que cruza Extremadura. En su recorrido está Zafra, un pueblo que es un centro artesanal, comercial y ganadero de gran influencia. Sobresale en la villa el Palacio de los Duques de Feria, hoy reconvertido en Parador, así como su Plaza Grande y su Plaza Chica.
Por otro lado, en Tierra de Barros debes marcar como destinos imprescindibles Almendralejo, una ciudad que es cuna del romanticismo y famosa por sus vinos y cavas; Feria, una pintoresca población con edificios de arquitectura tradicional y un imponente castillo del siglo XI; o Medina de las Torres y su yacimiento romano de Contributa Iulia.
Si hace calor, apunta el merendero de la Presa Honda, en la Rivera de Usagre, donde forma una piscina natural. Si le quieres dar un plus de relax a tu escapada por la Extremadura más extraordinaria, acude al balneario El Raposo, muy cerca de Zafra.

Raquel Andrés
Periodista y aventurera. Me has podido leer en Escapada Rural, Diari Nosaltres La Veu, La Vanguardia, El Salto y otros medios. Habitante y amante de las zonas rurales, sea cual sea el destino. Procuro escaparme una vez por semana con las botas de montaña, el arnés o el neopreno. También soy un intento de baserritarra.