Subida a Montejurra, la histórica cumbre de Navarra

Hay montañas que son codiciadas por los excursionistas por ser la más alta de una provincia o una comunidad autónoma, por tener una silueta peculiar, por tener una vía de ascenso desafiante, por los atractivos que presenta la subida o por tener un simbolismo especial. Es el caso de Montejurra, de 1.042 metros de altitud, ubicada en la zona del Prepirineo navarro, al sur de Estella-Lizarra.

Nos adentramos en la historia de esta cumbre navarra y detallamos tres vías de ascenso que no son demasiado complicadas, a excepción del tramo final para los que quieran llegar hasta la cúspide.

El simbolismo del “monte sagrado de la tradición”

Seguro que a muchos os sonará el nombre de Montejurra, incluso aunque no sepáis decir muy bien por qué. La clave está en que es un monte simbólico porque fue escenario de diferentes batallas de las guerras carlistas durante el siglo XIX. Eso hizo que a mediados del siglo XX en él hubiera concentraciones anuales del carlismo, movimiento político que nació siendo de corte tradicionalista y monárquico. Se le ha llegado a conocer como “el monte sagrado de la tradición”.

El desgraciado hito histórico que dio todavía más fama a la montaña fueron los llamados “sucesos de Montejurra” de 1976. Ese día, el habitual encuentro anual se inició con dos vía crucis: uno impulsado por una nueva rama partidaria de un carlismo socialista, y otro de corte tradicionalista que no veía con buenos ojos a los primeros. La tensión llegó hasta el punto de que hubo enfrentamientos y un grupo de mercenarios ultraderechistas acabó matando a dos personas.

En la actualidad, los encuentros anuales se siguen celebrando, aunque los trágicos sucesos supusieron una fuerte estocada al movimiento carlista y el número de participantes es bastante reducido. La romería a la cima se suele celebrar el primer domingo de mayo.

Tres vías sencillas de ascenso a Montejurra

Entre la tradición y la memoria, hoy la montaña de Montejurra es una de esas que hay que subir alguna vez en la vida. Además, las vistas desde las alturas son impresionantes: desde la cima se pueden ver las sierras de Urbasa, Andía y Lóquiz, así como la llanura del río Ega.

Las vías de ascenso pueden hacerse en familia, que estén acostumbradas a caminar, ya que no presentan dificultad. Tan solo hay que tener precaución en el último montículo rocoso, especialmente si las piedras están mojadas, y ayudarse de las manos para avanzar en algún paso. Los más valientes pueden llegar hasta la famosa espada que está clavada en la cima. Os dejamos tres rutas para subir a Montejurra.

Una ruta clásica y no muy larga que hace que subir a la cima de Montejurra sea bastante asequible. Se deja el coche en el parking que hay bajo la cara norte, a donde se llega desde Ayegui/Ayegi. Se sube por las cruces y por el camino de San Pantaleón, pasando por la ermita de San Ciprián, el buzón de Montejurra, el vértice geodésico y el árbol de piedra (una peculiar formación rocosa). El descenso enlaza con el Camino de Santiago. Puedes guiarte con este track. Otra opción es alargar un poco la ruta, unos 500 metros más, y aparcar en el monasterio de Irache.

Circular desde Muniáin de La Solana

Un poco más exigente que la primera ruta, asciende a las tres cimas de Montejurra. Podemos aparcar en el mismo pueblo, desde donde nos dirigiremos hasta la parte más alta, hacia la ermita de San Ramón. Allí sale una pista que continúa ascendiendo hasta la ermita de San Sebastián, con un refugio anexo. De seguido nos encontraremos con la senda del Vía Crucis, ya cerca de la ermita de San Cipriano. Queda un último repecho hasta alcanzar el altar excavado en la roca, coronar la primera cima (San Ciprián, a 1.042 metros) y seguir hacia Montejurra, hacia el pico de las antenas y el vértice geodésico. Se vuelve por una pista de cemento. Podéis seguir este track.

Circular desde Arellano

Es la subida con menos desnivel porque partimos de un punto alto como es el pueblo de Arellano, al sur de Montejurra. Tiene fuertes pendientes que superar, pero no muy largas. Seguiremos las marcas blancas y amarillas del PR-NA 188, que discurre en parte por una pista muy ancha. A los 3 kilómetros llegaremos a los Llanos de Montejurra, un cruce de caminos donde tomaremos el que conduce a las cimas. Si eliges esta opción, te recomendamos consultar este track.

¿Qué hacer cerca de Montejurra?

El entorno de Montejurra está lleno de planes para hacer. Para empezar, tanto si empiezas a caminar desde Ayegui como si lo haces desde otro de los puntos que hemos señalado, debes hacer una visita a este pueblo al bajar de la montaña. Concretamente, te recomendamos dirigirte al Monasterio de Santa María de Irache, que está junto a las Bodegas Irache. Este es un punto muy famoso del Camino de Santiago Francés por un motivo: ¡Hay una fuente con vino gratis!

La familia Santesteban, que regenta la bodega, instaló esta fuente con dos caños (el otro, menos conocido, es de agua) en 1991. Como un oasis, está bajo un cartel que dice a los peregrinos que es “para reponer fuerzas”. Todos los días echan 100 litros de vino elaborado con la uva de sus cosechas y es para disfrutar el trago en el momento, ya que no se permite rellenar botellas para llevárselas. Así lo advierten: “A beber sin abusar te invitamos con agrado, para poder llevar el vino ha de ser comprado”.

Cerca de Montejurra, no puedes dejar de visitar la ciudad señorial de Estella-Lizarra. De gran ambiente jacobeo, tiene una importante judería y tres joyas románicas: el palacio de los Reyes de Navarra, el claustro de San Pedro de la Rúa y la portada de San Miguel. Enfrente del albergue de peregrinos está el museo del Carlismo, una buena oportunidad para conocer la historia de este movimiento político y su relación con Montejurra.