
Las pozas y piscinas naturales son enclaves con mucho encanto. En España abundan estos parajes de gran belleza. La mayoría de las veces, los paisajes que las rodean son de esos que nos dejan sin aliento. La transparencia del agua o el rumor de una cascada añaden el toque de magia a estos lugares que todos queremos visitar. Son ideales para refrescarnos en los días más calurosos del verano. O, simplemente, para visitarlos y admirarlos en cualquier época del año.
Con este atractivo natural y el efecto hipnótico que producen, no es de extrañar que el cine y la televisión se hayan fijado en las piscinas naturales. Muchas de ellas han servido de escenario para destacadas producciones audiovisuales. Aquí te presentamos algunas pozas españolas de gran belleza que han aparecido en películas, series o anuncios de televisión. Por si las viste en la pantalla y te quedaste con ganas de ir a conocerlas.
Gorg del Molí dels Murris, en Les Planes d’Hostoles (Girona)

Comenzamos nuestro recorrido por las pozas españolas de película en la comarca de La Garrotxa (Girona). Allí se encuentra el Gorg del Molí dels Murris, una piscina natural con cascada y rodeada de una espesa vegetación. Este espectacular paraje natural fue una de las localizaciones principales de la película Verano 1993. Es la ópera prima de la directora barcelonesa Carla Simón, quien en 2022 ganaría el Oso de Oro de la Berlinale con Alcarrás.
Basada en la biografía de la propia directora, Verano 1993 narra las vivencias de una niña de 6 años que se muda a Les Planes d’Hostoles para vivir con sus tíos, quienes la adoptan tras quedar huérfana. La película está rodada íntegramente en los alrededores de Olot y La Garrotxa, con el Molí dels Murris como uno de sus escenarios destacados.

Esta es una de las cascadas más bonitas de Cataluña, un paraje de postal que nos evoca al Caribe. El Molí dels Murris es una de las pozas del Espacio Natural del río Brugent, un auténtico oasis de agua en el interior de Cataluña con siete piscinas naturales que te dejarán sin aliento.
Piscina natural de Villanueva de la Vera (Cáceres)

Nos vamos a Extremadura para visitar la comarca de la Vera, al sur de la sierra de Gredos. Una zona bien conocida por la abundancia de pozas, cascadas, gargantas e incluso piscinas naturales bajo puentes históricos de una belleza imponente. Por ejemplo, muy cerca de aquí, en la comarca vecina del valle del Jerte, se ubica la famosa Garganta de los Infiernos.
El paisaje de Villanueva de la Vera (Cáceres) toma protagonismo en la película Cerdita. También su preciosa piscina natural. Allí discurren varias escenas de este thriller de terror, obra de la directora Carlota Pereda, natural de la localidad. El filme se adentra en el fenómeno del bullying: la protagonista sufre burlas en el pueblo por su aspecto físico y debe enfrentarse a un inquietante dilema. Hay que destacar que el rodaje fue sostenible y respetuoso con el entorno natural, con un protocolo para reducir y compensar la huella de carbono.

La piscina natural de Villanueva de la Vera, una de las localizaciones principales de Cerdita, está a aproximadamente un kilómetro del casco urbano del pueblo. Es un lugar muy popular para refrescarse en los meses de verano. Cuenta con escalerillas de acceso, zonas de sombra, césped, merendero, vestuarios, aseo y un chiringuito-restaurante. Muy cerca de allí podemos visitar la cascada del Diablo, otro punto natural de interés de este pueblo que está declarado Conjunto Histórico-Artístico.
Charco de La Laja, en San Juan de la Rambla (Tenerife)

Tomamos el avión para viajar hasta Tenerife. La más grande de las Islas Canarias es bien conocida por sus playas y por el mítico Teide, la cumbre más alta de la geografía española. También, por sus numerosas piscinas naturales, a menudo situadas bajo vertiginosos acantilados. Son auténticos rincones paradisíacos que se forman gracias a las mareas. Allí, estas piscinas naturales se conocen como ‘charcos’.
Precisamente uno de estos charcos, el de La Laja, en San Juan de la Rambla, es nuestro próximo protagonista. Este increíble paraje natural situado en la vertiente norte de la isla fue elegido por Prime Video como escenario de Los Anillos de Poder, una superproducción ambientada en el mundo mágico de El Señor de los Anillos. Aquí se desarrolla una espectacular escena en la que una de las protagonistas se sumerge en el mar para enfrentarse a una peligrosa criatura. Otras escenas de la serie fueron rodadas en el Parque Nacional del Teide.

Como anécdota, para decorar el suelo en un pasaje de la serie utilizaron tinta de calamar como pigmento, para no contaminar el mar. También se contrataron especialistas en oceanografía, ornitología, arqueología o paleontología, con el objetivo de respetar al máximo el entorno natural.
El charco de La Laja es uno de los más populares del norte de Tenerife. Es una zona de baño bastante accesible, con un camino escalonado bien acondicionado. Para bañarse aquí, entre rocas volcánicas y junto a la bravura del mar, hay que guardar cierta precaución: hacerlo con marea baja y siguiendo las indicaciones de los carteles orientativos.
Salto de Bierge (Huesca)

Volvemos a la península para acercarnos hasta el Salto de Bierge, uno de los espacios naturales de baño más populares de Huesca. Y eso que la provincia oscense, y Aragón en general, andan sobradas de pozas y piscinas naturales: el salto de Pozán de Vero, muy cerca de Bierge; la Garcipollera de Castiello de Jaca y la gorga de Boltaña, en pleno Pirineo; y las pozas de Aguaviva o La Pesquera de Beceite, en la provincia de Teruel, son solo algunos ejemplos.
El Salto de Bierge ya era bien conocido por los habitantes de la zona y sus alrededores, especialmente los amantes del barraquismo. Una increíble piscina natural de aguas cristalinas formada por la presa del río Alcanadre, que desemboca en una espectacular cascada de 10 metros de altura. El enclave protagonizó en el verano del 2015 el lanzamiento del Samsung Galaxy S6: una chica inmortalizando su salto desde la presa, gracias a las prestaciones de la cámara del que por entonces era su último modelo.
Esta aparición televisiva disparó de tal manera la popularidad del Salto de Bierge que estuvo a punto de arruinarlo: la masificación y el incivismo llenaron el enclave de basura. El ayuntamiento tomó medidas: desde 2017 hay que pagar entrada (destinada al mantenimiento) y se ha limitado el aforo a 250 personas. Aunque ahora está prohibido lanzarse desde lo alto de la presa, el Salto de Bierge ha recuperado su esplendor y es una piscina natural perfecta para pasar un día en familia o con amigos en pleno Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara.
Miguel Perez
Me encanta el fútbol, leer, viajar, descubrir nuevos destinos y contártelos